Comunicación neuronal y neurotransmisores

Para pasar de una neurona a otra, la señal tiene que cruzar una sinapsis, que es un pequeñísimo espacio que se encuentra entre el axón de la neurona que envía y las dendritas de la neurona que recibe.

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Comunicación neuronal y neurotransmisores

Para pasar de una neurona a otra, la señal tiene que cruzar una sinapsis, que es un pequeñísimo espacio que se encuentra entre el axón de la neurona que envía y las dendritas de la neurona que recibe. La señal viaja a través de ese espacio, llamado espacio sináptico, mediante mensajeros químicos llamados neurotransmisores, los cuales llevan el mensaje a través del espacio sináptico hasta la neurona receptora. La dopamina y la acetilcolina son ejemplos de neurotransmisores. Los neurotransmisores son sustancias químicas que participan en la sinapsis en respuesta a un estímulo nervioso. El neurotransmisor, debe embonar perfectamente, como una pieza de rompecabezas, en las dendritas, pues de otra manera el mensaje no llegará a la neurona receptora.

Neurotransmisores Acción
Acetilcolina Excitatoria de la unión neuromuscular.
GABA (ácido gamma. aminobutírico) Ansiolítico, inhibe estados de ansiedad.
Noradrenalina Mantiene el estado de alerta, regula los estados de ánimo.
Endorfinas Inhiben el dolor, participa en la memoria el aprendizaje y la actividad sexual, regula la temperatura corporal.
Encefalinas Inhiben el dolor.
Dopamina Participa en las respuestas emocionales y la regulación del tono muscular.
Serotonina Percepciones sensoriales, control de la temperatura, regula estados de ánimo e induce el sueño.

Alguna vez te has preguntado qué mecanismos internos del cuerpo humano hacen que cada uno de nosotros tenga diferente respuesta a estímulos dolorosos, y si vamos un poco más allá, ¿por qué las mujeres son más tolerantes al dolor que los hombres? Esto se debe a que el sistema nervioso libera ciertos neurotransmisores específicos con función analgésica, los cuales reciben el nombre genérico de endorfinas. Se ha observado que esos neurotransmisores tienen un efecto semejante a la morfina, que por mucho tiempo ha sido utilizada en la medicina con fines terapéuticos, como analgésico potente en pacientes con enfermedades terminales (como el cáncer).

En tales casos no importa si la droga causa dependencia, lo que interesa es lograr un efecto rápido y certero en casos severos de dolor, por esta razón se relacionó la palabra endógeno más morfina, quedando finalmente el término endorfinas. Posteriormente se descubrieron algunos derivados que son las encefalinas, que se producen en la cabeza y de ahí su nombre. Tanto las endorfinas como las encefalinas tienen efectos muy potentes de alivio contra el dolor, como la morfina, sin embargo, cada uno de nosotros libera estos neurotransmisores de manera diferente, y también interpreta y tolera el dolor de acuerdo a sus propias experiencias y expectativas. El dolor tiene un factor objetivo relacionado con el registro sensorial de receptores neuronales (llamados terminaciones nerviosas libres), pero también incluye un factor subjetivo que tiene que ver con factores psicológicos, tales como: actitudes, creencias y aprendizajes.

Ahora bien, ¿qué sucede cuando no trabajan bien los neurotransmisores? Pues bien, la investigación neurológica ha permitido establecer que el exceso o la disminución en la producción de neurotransmisores puede provocar graves alteraciones en el comportamiento. La enfermedad de Alzheimer, que produce alteraciones en la memoria, tiene que ver con disminución de la acetilcolina.

El mal de Parkinson, que ocasiona espasmos musculares, se asocia con la disminución del neurotransmisor dopamina, en cambio la esquizofrenia, que es una enfermedad mental muy grave en la que el sujeto pierde la noción de la realidad, se asocia con la producción excesiva de la misma dopamina.

Algunos estados emocionales extremos, como la depresión y la manía, también se relacionan con defectos en la función de otros neurotransmisores.

Las neuronas disparan impulsos cuando son estimuladas por cierto tipo de energía, por ejemplo, un estímulo del medio ambiente (el frío, el calor, el movimiento, un sonido, la luz) o un impulso proveniente de otra neurona. Las neuronas nunca disparan parcialmente: al igual que una pistola, disparan o no disparan. Como es natural a este principio se le denomina respuesta de todo o nada.

Por otra parte, adicionalmente a las neuronas, el sistema nervioso cuenta con otro tipo de células, la neuroglía o células gliales. La glía forma el tejido de sostén para las neuronas y se divide en macroglía y microglía. La macroglía está formada por los astrocitos y los oligodendrocitos. Los astrocitos ayudan a reestablecer la comunicación sináptica tras una lesión cerebral, formando una barrera de vasos capilares que impide el paso de sustancias tóxicas, los astrocitos son fundamentales después de sufrir un fuerte golpe en la cabeza, es decir, un traumatismo cráneo-encefálico. Por su parte los oligodendrocitos son los responsables de producir la mielina necesaria para que los axones de las neuronas cumplan sus funciones de comunicación. En lo que se refiere a la microglía, ésta cumple la función de mantener limpio el tejido nervioso, fagocitando los cuerpos extraños y de desecho.

Actividad

Instrucción: Acomoda en cada círculo el neurotransmisor involucrado.

Autoevaluación

Instrucción: Relaciona el padecimiento con el neurotransmisor involucrado para ello arrastra cada opción.

Concepto

La disminución de acetilcolina.
La producción deficiente de GABA.
La producción excesiva de dopamina.
La disminución de dopamina.

Definición

La enfermedad de Alzheimer, que produce alteraciones en la memoria.
El mal de Parkinson, que ocasiona espasmos musculares.
La esquizofrenia, que es una enfermedad mental muy grave en la que el sujeto pierde la noción de la realidad.
La ansiedad, es una enfermedad emocional y química.