Herramientas de investigación en psicología

Los investigadores utilizan diversas herramientas para obtener la información pertinente de lo que se está estudiando, entre ellas las más comunes son pruebas psicológicas, entrevistas y observaciones.

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Herramientas de investigación en psicología

Herramientas de investigación en psicología

Los investigadores utilizan diversas herramientas para obtener la información pertinente de lo que se está estudiando, entre ellas las más comunes son pruebas psicológicas, entrevistas y observaciones.

Las pruebas psicológicas registran y comparan: capacidad intelectual, habilidades motoras, sentimientos, actitudes y valores, entre otros rubros, a partir del cómo un sujeto responde a un determinado evento o problema.

Las entrevistas exploran sentimientos y actitudes; el cómo una persona se describe a sí misma y a aquello que le rodea, cuando habla con el entrevistador. También permiten explorar conocimientos y aptitudes, por ejemplo, cuando se entrevista a candidatos para un empleo que requiere de ciertas habilidades.

Las observaciones son registros y descripciones que el investigador hace de la conducta de un sujeto o grupo de sujetos. La observación puede llevarse a cabo tanto en un laboratorio, como en un escenario natural; la casa, la escuela, el transporte público, el trabajo. La información recolectada sirve para sacar conclusiones que sean aplicables a una gran cantidad de personas.

A continuación, te presentamos un ejemplo de formato de observación:

Diseños de Investigación

Las herramientas se utilizan en diversos tipos de diseños de investigación. Existen cuatro diseños básicos para el estudio del desarrollo y del comportamiento:

  • Estudios experimentales
  • Estudios correlacionales
  • Estudios observacionales
  • Estudios transversales y longitudinales

En general, los diseños de investigación se utilizan para entender cómo una variable se relaciona con otra, o bien, para establecer relaciones causa-efecto o de correlación entre las variables estudiadas.

En los estudios experimentales el investigador manipula una o más variables con el fin de observar el efecto de la manipulación en el comportamiento. El factor experimental que el investigador manipula para medir su efecto, se denomina variable independiente, mientras que el resultado o producto de la manipulación se denomina variable dependiente, ya que depende de la manipulación de la variable independiente.

En los estudios correlacionales se examina la relación entre variables (aquellos eventos que se desea estudiar), pero no se ejerce ningún control sobre las variables estudiadas, sino solamente se verifica la relación entre ellas. Frecuentemente las correlaciones se usan para efectuar predicciones de una variable a otra. Por ejemplo, podría plantearse la pregunta ¿hay alguna relación entre el tipo de institución educativa y el rendimiento académico? Una forma de responder es recabar datos de las calificaciones en un mismo examen de estudiantes que proceden de escuelas públicas y privadas.

Si los resultados muestran una relación directa entre dos variables; si una se incrementa o decrementa, en la otra ocurre lo mismo, estaremos hablando de una correlación positiva, pero cuando encontramos una relación inversa entre las variables, es decir cuando una se incrementa y la otra decrementa o viceversa, estaremos hablando de una correlación negativa.

En los estudios observacionales el investigador elabora un registro de su observación, pudiendo utilizar estas observaciones para ayudarse a elaborar una hipótesis y posteriormente diseñar un experimento. La observación tiene la ventaja de que no requiere contacto físico o verbal directo con los sujetos. Podemos observar a los peatones cruzar una calle transitada o a la gente que platica en un café. Es el método idóneo para estudiar comportamientos no verbales (como gestos, posturas y formas de sentarse).

En los estudios observacionales el investigador elabora un registro de su observación, pudiendo utilizar estas observaciones para ayudarse a elaborar una hipótesis y posteriormente diseñar un experimento. La observación tiene la ventaja de que no requiere contacto físico o verbal directo con los sujetos. Podemos observar a los peatones cruzar una calle transitada o a la gente que platica en un café. Es el método idóneo para estudiar comportamientos no verbales (como gestos, posturas y formas de sentarse).

La observación es un método útil por sí mismo y también como complemento de otros procedimientos. Antes de iniciar un estudio con entrevistas, por ejemplo, antes de acercarse a los usuarios de un servicio público para entrevistarlos, será recomendable invertir algún tiempo en observar el comportamiento en esa situación, lo que dará información para diseñar las preguntas más importantes. Se querrá saber dónde encontrar a la gente, cuanto tiempo estará disponible y cuáles serán las posibles distracciones. Antes de iniciar un experimento se querrá saber algo acerca del comportamiento en su estado natural; de lo contrario se corre el riesgo de crear condiciones en el laboratorio inexistentes en el mundo real.

Los estudios transversales son aquellos en que se recolectan datos una sola vez de varias personas de diferentes edades, esto permite obtener información sobre las diferencias en el desarrollo en diversos grupos de edad; por ejemplo el desempeño en tareas cognitivas de grupos de 3, 6 y 9 años de edad. Por otro lado, en los estudios longitudinales la misma persona es evaluada más de una vez con el fin de observar si ocurren cambios en ella a través del tiempo, lo que da una idea del proceso de su desarrollo.

Actividad

Realicemos una actividad para evaluar lo aprendido. Coloca dentro de las definiciones el concepto que corresponda.

Concepto

Estudios correlacionales
Estudios observacionales
Estudios transversales
Estudios experimentales

Definición

Ocho de cada diez madres jóvenes perciben menos de tres salarios mínimos, lo cual representa una clara desventaja que, aún así, presenta lentas mejorías en el tiempo, pues en el año 2000 esta situación se presentaba entre nueve de cada diez mujeres con características similares.
Si bien el descenso en el nivel de analfabetismo ha beneficiado a todos los jóvenes, es claro que ha sido más favorable para los adultos jóvenes y especialmente para las mujeres, quienes muestran un descenso relativamente más amplio. Así, mientras los adolescentes incrementaron la tasa de alfabetismo en 13.1 puntos porcentuales, al pasar de 85.0 a 98.1 por ciento entre 1970 y 2005, los adultos jóvenes lo hicieron en 15.1 puntos, al pasar de 82.0 a 97.1 por ciento.